Personaje folclórico retratado en la obra Conversación en la Catedral, de Mario Vargas Llosa. Su vetusta mente dio origen a una "ideología" denominada etnocacerismo, una forma de nacionalismo extremo que reivindica a la etnia andina como la única capaz para liberar a los peruanos del sistema de explotación que instaló la colonización española. Se suma la exaltación del mariscal Andrés Avelino Cáceres, quien durante la Guerra del Pacífico contra Chile (1879-1883) resistió a los invasores en los Andes.Dentro de sus grandes propuestas para el progreso del país destacan la amnistía a los máximos cabecillas de Sendero Luminoso y del MRTA, Abimael Guzmán y Víctor Polay, respectivamente porque los considera presos políticos y porque en su opinión ambas organizaciones terroristas ya no representan un peligro para el Perú.
No contento con empobrecer intelectualmente al Perú con sus ideologías anticuadas, trajo al mundo a personajes de la talla de Ollanta, Antauro y Ulises Humala quienes tienen la misión de propagar las "ideas" de Don Isaac.
Aunque su avanzada edad seguramente no lo deja utilizar ciertas partes de su cuerpo, este añejo personaje propone invadir Chile utilizando su pene como arma, lo cual nos parecería una buena idea si es que le funcionara.
Sr. Humala, haganos el favor y váyase a arruinar a nuestros vecinos del sur, acá no lo necesitamos.
1 comentario:
Y que culpa tenemos en Chile de que allende La Concordia se den personajes de tal laya? Haganse cargo solitos, tal vez podrian hacer un museo del horror o algo asi, porque dudo mucho que tales seres pasen las barreras fitosanitarias de la Republica de Chile...
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